Los productos congelados tienen una amplia distribución y en los últimos años han tenido una alta aceptación por parte del consumidor. Esto se debe a tres razones: “Su fácil consumo, su prolongada vida útil -ya que pueden permanecer varios meses en buen estado- y porque se han incorporado a ellos alimentos preparados y otros tipos que permiten a los usuarios acceder a alimentación mucho más rápida y, en algunos casos, más barata”, explica Marcela Zamorano, magíster en Ciencia de los Alimentos y académica de la Universidad de Santiago.

Es así como la industria ha ido pasando de ofrecer solo vegetales congelados a incluir productos animales, procesados o semiprocesados, que necesitan una cocción muy baja o un simple calentamiento. “Eso ha abierto el mercado y debido a la situación de pandemia que vivimos, es y ha sido una alternativa de cocción rápida, no solo en Chile, especialmente para mujeres que trabajan y necesitan cocinar en forma rápida”, destaca Zamorano.

A ello se suma la situación global de recesión e inflación, que ha obligado a muchos restaurantes, casinos y hoteles a preferir la opción de productos congelados “como un ahorro de mano de obra”, asegura Eduardo Araos, director comercial de Aliace.

Mercado al alza

Según Cristopher Reveco, socio de Auditoría de EY, en años anteriores, el mercado de los congelados representaba aproximadamente un 12% de lo que una persona podía destinar de su presupuesto.“Eso está cada vez en mayor crecimiento y en desarrollo de productos. Por ejemplo, antes del 2020 la industria presentaba retornos aproximados de US$ 70 millones, mientras que los años posteriores se cerró con aproximadamente con US$ 500 millones”, dice el ejecutivo.

Coincide el reporte de Deloitte sobre Preferencias y Tendencias del Consumo de Alimentos en Chile, al indicar que el

12% del presupuesto mensual de alimentos en los hogares nacionales se va a alimentos congelados, y el 22% de las personas pertenecientes a la generación X, entre 40 y 49 años, compran alimentos congelados una vez por semana.

En ese sentido, Reveco dice que “es inminente el continuo crecimiento en el tiempo, tanto por los grandes productores alimenticios como por las pymes de nicho”.

El aumento del consumo de congelados también está estimulando el lanzamiento de nuevos productos, destaca Andrés Chehtman, consultor en Euromonitor International.“Hoy se ofrecen más helados, más opciones de comidas listas como lasañas y nuevas variedades de verduras congeladas”, dice, mientras destaca lo que ha hecho la marca Frutos del Maipo en ese camino, con una línea de productos plant-based y una base para preparar lentejas.

Según cifras de Euromonitor International, el total de ventas de comidas preparadas congeladas en Chile llegó a US$ 13,5 millones en 2016 y a US$ 26,2 millones en 2021. La firma proyecta qu e llegará a US$ 26,8 en 2026.

Y la tendencia es global: un reciente informe de Grand View Research proyecta que el tamaño del mercado mundial de alimentos congelados alcanzará los 380.500 millones de dólares para 2027, con una tasa compuesta anual del 3,4%.

A la luz de estas cifras, Rafael Vilches, subgerente de Innovación de Ñuble Alimentos, comenta que en el sector cárnico, por ejemplo, las personas antes compraban bandejas frescas de pollo o de carne molida para llegar directo a congelarlas a casa.“Dada la tecnología, actualmente compramos pollo congelado IQF (congelado en piezas individuales) o carne molida congelada en bloques de 250 gramos.Y los vegetales y pulpas de fruta congelada también han aumentado su consumo”, sostiene.

Miguel Aburto, académico del Departamento de Gestión Agraria de la U. de Santiago también ve un alza en el mercado chileno por la disponibilidad anual de los congelados y dice que, por ejemplo, la oferta de berries se está reestructurando comercialmente para el mercado interno, “en platos listos para calentar y servir”.

Ante la continuidad de las tendencias de trabajo remoto o híbrido, es de esperar que los productos congelados se vean beneficiados, subraya Andrés Chehtman, y añade que la mejora en la logística de entrega de este tipo de productos al hogar “es un factor que también contribuye a su consolidación”.